Síntomas de la sífilis.
Bueno como os había prometido antes ahí va un análisis más detallado sobre los síntomas de la sífilis.
Normalmente los síntomas de la sífilis vienen por fases dependiendo del grado de avance de la enfermedad. Os voy a poner un esquema para que lo entendáis mejor.
La enfermedad tiene varias etapas: Sífilis primaria; Sífilis secundaria; Sífilis terciaria y Sífilis cuaternaria.
Esta enfermedad puede dividirse también en sífilis precoz o temprana, que incluye la primaria y la secundaria y sífilis tardía que incluye la terciaria y cuaternaria.
Los síntomas de la sífilis primaria son la aparición de una úlcera abierta no dolorosa llamada chancro y que está presente en los genitales, la boca, la piel, el recto o la vagina. La aparición del chancro suele producirse unas tres semanas después del contagio, aunque puede aparecer más tardíamente.
La fase de sífilis secundaria suele ocurrir entre 2 y 8 semanas después de la aparición del chancro. La sífilis secundaria se caracteriza por una erupción ( no dolorosa) que afecta tanto piel como mucosas . Esta erupción suele afectar también las palmas de las manos y las plantas de los pies. En esta fase hay un paso de la bacteria a la sangre por lo que pueden aparecer también síntomas como fiebre, malestar general, mialgias, inflamación de ganglios linfáticos, dolor de cabeza, pérdida de peso y fatiga.
Después de la fase secundaria se entra en una fase latente de la sífilis en la que desaparecen los síntomas y que puede durar muchos años. Esta persona continua teniendo sífilis aunque no tenga ningún síntoma. Si no se trata la enfermedad la bacteria se reproduce y se acumula en diversos tejidos como los huesos, la piel y las mucosas, el tejido nervioso, el corazón y las arterias dando lugar a la tercera y cuarta fase.
Los síntomas de la tercera y de la cuarta fase los voy a englobar dentro de la sífilis tardía, porque en la mayoría de los casos los síntomas se suceden al mismo tiempo.
En esta fase la sífilis se vuelve a despertar para atacar directamente al sistema nervioso o algún órgano, además se producen los problemas más serios y puede llegar a provocar la muerte. Algunos de los problemas son: trastornos oculares, cardiopatías, lesiones cerebrales, lesiones en la médula espinal, pérdida de coordinación de las extremidades y aneurismas.
Aunque un tratamiento con penicilina puede matar la bacteria, el daño que haya hecho en el cuerpo podría ser irreversible.
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